
Tiempo de ocio
Se acercan las fiestas de la Mercè 2018, y con él un fin de semana largo y para celebrarlo en familia, con amigos o en solitario.
Os proponemos diferentes opciones culturales que podéis hacer en Barcelona estos días.
Hasta el 14 de octubre se puede visitar en el Museu Nacional d’Art de Catalunya la exposición Gala Salvador Dalí. Una habitació pròpia a Púbol.
© Fundació Gala-Salvador Dali Figueres Salvador Dali. Retrat de Gala amb dues costelles de xai en equilibri sobre la seva espatlla, 1934
¿Quién fue Gala? ¿La mujer que, en el pasaporte, se llamaba Helena Dmitrievna Diakonova? ¿Una de las musas más extraordinarias que ha dado el Olimpo? ¿La esposa del poeta Paul Éluard y, después, del pintor Salvador Dalí? El MNAC la descubre en una gran exposición.
Desde el 13 de septiembre hasta 27 septiembre 2018 se puede visitar la exposición Saul Leiter. In Search of Beauty en fotocolectania.
©Saul Leiter, Harlem, 1960. ©Saul Leiter Foundation, Cortesía de Gallery FIFTY ONE
Exposición dedicada a la obra de Saul Leiter, el sorprendente precursor de la fotografía en color. Leiter combinó la fotografía y la pintura toda su vida, y continuó pintando diariamente hasta su muerte en noviembre de 2013 a los 89 años. Pero la cámara se convirtió en el medio a través del cual logró capturar e interpretar la vida de la ciudad de Nueva York en composiciones de varias capas, así como en escenas íntimas, como nadie lo había hecho antes.
Desde el 11/ de octubre hasta el 13 de enero se podrá visitar PICASSO – PICABIA en la Sala Fundación MAPFRE Garriga Nogués (Barcelona)

© Sala Fundación MAPFRE Garriga Nogués (Barcelona)
La exposición Picasso-Picabia une, por primera vez, a estos dos artistas fundamentales del siglo XX a través de un recorrido por la historia del arte moderno. El diálogo que se establece entre las obras de los dos artistas mostrará los vínculos reales o imaginados entre ellos. Así, la muestra comienza con la aparición del cubismo y continúa con el surgimiento de Dadá -del que Picabia es sin duda uno de sus protagonistas-, sin olvidar los años veinte, cuando ambos comparten el gusto por una personal vuelta al clasicismo. La muestra finaliza con una selección de sus últimos lienzos: si Picasso vuelve incansablemente a la figura humana hasta su muerte, Picabia, por su parte, reduce el acto de pintar a sutiles monocromos salpicados por puntos.